Una hora en tres minutos
Ioannina desde el lago Pamvótida |
A pesar de ser la capital de la
región de Épiro y, por tanto, la ciudad más importante de la zona,
Ioannina no es grande; de hecho, su población solo ronda las 100.000
almas. Esto, junto a su ubicación en una región montañosa a orillas
del lago Pamvótida, la convierte en un lugar encantador,
merecedora de una visita si se viaja por esta comarca. Además, es una
excelente base para ver los pueblos de Zagoria y el oráculo de Dodona.
Parece que fue fundada a partir de un monasterio dedicado a San Juan Bautista, del que derivaría su nombre (Agios Ioannis), cuya
población creció tras la toma de Constantinopla por los cruzados y que,
como el resto del imperio, acabaría en manos de los turcos hasta la
independencia de Grecia.
Puerta Oeste de la muralla |
El
centro histórico de la ciudad es un cabo que se interna en el lago, rodeado de murallas de origen
bizantino, con casas de pequeña altura, algunas de tipo otomano, y con
callejuelas, más bien estrechas, de agradable paseo. La mayoría se
encuentran rehabilitadas, aunque las obras por mejorar las calles
continúan.
Calle intramuros de la antigua ciudad otomana |
Puerta de acceso a Its Kale |
Grabado de 1.844 del interior de Its Kale (Le magasin pittoresque) La tumba de Ali Pashá en primer plano y el harén al fondo |
Mezquita Fethiye y tumba de Ali Pashá.
Mirhab de la mezquita Fethiye |
La mezquita Fethiye o "mezquita
de la conquista", fue erigida en 1.430 en el punto más alto de la
acrópolis, inmediatamente después de la captura de la ciudad por los
otomanos. Aunque inicialmente era de madera, a principios del siglo XVII
se la sustituyó por un edificio de piedra. Su interior conserva algunos
restos de pintura y alberga un pequeño museo dedicado principalmente a
Alí Pashá.
Tumba de Ali Pashá con la mezquita Fethiye detrás |
Ali Pashá era un guerrillero albanés al que los otomanos nombraron gobernador de Rumelia occidental (oeste de los Balcanes). Aprovechando la debilidad del gobierno central, se instaló en Ioannina y se convirtió en déspota semi-independiente.
Aunque mejoró la economía y el nivel cultural, su crueldad y ansias expansionistas le llevaron a ser asesinado por agentes turcos siendo su cabeza enviada al sultán.
Se le enterró junto a la mezquita y su tumba se cubrió con una celosía metálica decorativa que desapareció durante la 2ª Guerra Mundial. La celosía actual es una copia.
Fachada Sur del harén |
Icono con Constantino y Santa Helena |
El edificio del harén otomano está totalmente reconstruido siguiendo el estilo de la época y se ha convertido en un museo de iconos.
Uno de los edificios está dedicado a la exposición de joyas de época con preciosos abalorios para las novias.
Se incluyen algunos ejemplares de cruces talladas en madera y engastadas en plata.
Bliblioteca otomana |
Una curiosidad que nos llamó la atención es la costumbre de poner pegados a los postes de la electricidad carteles avisando de las defunciones recientes. Debe ser que nadie se preocupa de quitarlos luego, por lo que es tal la acumulación que parecería que ha pasado por allí el angel de la muerte después de una borrachera.
En el lago Pamvótida está la única isla lacustre habitada de Grecia. En ella podemos visitar una pequeña población con tiendas y restaurantes, y varios monasterios medievales con pinturas, aunque es cuestión de suerte encontrarlos abiertos, ya que algunos están en restauración.
Llegada al puerto de Nisaki en la isla de Ioannina
Para viajeros
Ioannina cuenta con un aeropuerto que tiene vuelo directo con Atenas dos veces al día (mañana y tarde) y de una hora de duración. Curiosamente, si se intenta llegar desde Madrid, la web de Aegean airlines no nos dejará sacar el vuelo Madrid-Atenas-Ioannina; como si no existiera. Hay que sacar el vuelo Madrid-Atenas, y luego Atenas-Ioannina separadamente; aunque las maletas las podremos facturar directamente. En el aeropuerto de Ioannina hay un servicio de alquiler de vehículos muy eficiente.
Si no vamos a disponer de vehículo propio, en el centro histórico se encuentran algunos pequeños hoteles de buen aspecto.
Si llevamos vehículo y queremos visitar el centro histórico, el mejor aparcamiento se encuentra extramuros, al sur del cabo; es gratuito. Si el aparcamiento estuviera lleno, la mejor opción es rodear las murallas en el sentido de las agujas del reloj hasta llegar al lago.
La isla tiene un servicio de enlace con la ciudad frecuente y barato desde el muelle, frente a la muralla oriental, hasta Nisaki, la única población de la isla. A los pequeños monasterios se puede llegar a pie sin ningún problema; incluso se puede dar toda la vuelta a la isla paseando a pie en menos de una hora..