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| Mausoleo de Tamerlán |
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| Mocárabes del mausoleo de Tamerlán |
Mausoleo de
Amir Timur (siglo XIV)
El Gur-e-Amir (tumba del rey) o mausoleo de Tamerlán, como se le conocía en occidente, es uno de los monumentos de imprescindible visita en Samarkanda.
Timur es el héroe nacional; no hay ciudad en Uzbekistán que no tenga alguna
estatua suya. Nació en la primera mitad del siglo XIV, y en poco más de veinte años
conquistó ocho millones de kilómetros cuadrados de Eurasia, desde Delhi hasta Moscú. Promovió el
comercio y la agricultura, aunque no fue capaz de establecer una estructura de
estado estable para que su imperio se mantuviera durante los siglos
posteriores.
Realmente este mausoleo fue construido por orden de Timur en
1404 para alojar el cuerpo de un nieto suyo muerto en batalla, pero cuando
Timur murió durante la expedición que había emprendido para conquistar China, también fue enterrado aquí. A este edificio se le considera precursor de un monumento tan famoso como el Taj Mahal en la India.
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| Mausoleo de Tamerlán |
El interior del mausoleo fue decorado con papel maché (pasta de papel), técnica en la que los uzbecos han sido maestros. No está restaurado, ya que se ha conservado a la perfección.
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| Mausoleo de Tamerlán |
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| Tumba de Timur |
En el mausoleo, además de la tumba del propio Timur (la de color negro), se encuentran las de algunos de sus hijos y nietos, así como la de su maestro espiritual.
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| Mausoleo de Tamerlán |
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| Observatorio de Ulugbek |
Observatorio de Ulugbek (siglo XV)
Ulugbek era uno de los nietos de Tamerlán, y su principal
afición eran las ciencias, principalmente la astronomía, siendo sus obras escritas conocidas en Europa.
Este es un inmenso sextante astronómico de mármol, que servía para medir las coordenadas
del sol, la luna y las estrellas. Con él, pudo calcular la ubicación, todavía válida,
de más de mil estrellas.
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| Observatorio de Ulugbek |
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| Mezquita de Bibi Khanim |
Mezquita de Bibi Khanim (siglo XIV)
Tras su campaña en la India, Tamerlán decidió construir en
su capital la mezquita más grande del mundo islámico. Aunque según la leyenda,
fue su esposa favorita, Bibi Khanim, quien la ordenó construir como sorpresa
para su marido mientras estaba guerreando en dicho país. La leyenda dice que el
arquitecto se enamoró de ella y se negó a terminarla si no le daba un beso, lo
que Bibi Khanim hizo. Cuando Timur regresó y se enteró de lo ocurrido, la tiró
desde lo alto del minarete. Del arquitecto nunca más se supo.
La mezquita es tan grande que ya empezó a agrietarse en tiempos de
Timur. Hoy día está en restauración y no se puede acceder a su interior por
miedo al derrumbe.
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| Mezquita de Bibi Khanim |
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